A todos los que en esta larga espera
nos habéis ido dando fuerzas, ánimos y esperanzas...
a los que nos habéis ofrecido palabras de consuelo,
sonrisas cómplices o abrazos llenos de sentimiento...
a los que nos habéis puesto el hombro para llorar o descansar...
a los que nos habéis escuchado con infinita paciencia...
GRACIAS...
y
"que el camino salga a vuestro encuentro,
que el viento sople siempre a vuestras espaldas,
que el sol ilumine siempre vuestra cara,
que la lluvia empape poco a poco vuestros campos,
y hasta que volvamos a vernos...
que Dios os lleve en la palma de su mano".
El día 12 de agosto de 2008 fuimos a la Diputación de Vizcaya porque ya habían pasado casi tres años desde que se había elaborado el expediente y había que actualizarlo. En esa reunión supimos que las asignaciones habían llegado a Madrid y que pronto te pondríamos cara y nombre. ¡¡LOS NERVIOS ESTABAN A FLOR DE PIEL!!
En el mes de julio del 2008 pensamos que tal vez podríamos conocerte, ver tu cara, saber tu nombre, y volar a buscarte… ¡¡aunque fuera en medio de las Olimpiadas!! Pero nos quedamos a las puertas. Había que seguir esperando un poco más, sabiendo y confiando en que aunque a veces el invisible hilo rojo puede tensarse o enredarse, nunca podrá romperse.
A todos los que en esta larga espera
El 26 de enero de 2006 nuestra petición entra en China y comienza su andadura. 
Después de darle algunas vueltas, y de hablarlo con algunos amigos, fue en los primeros meses del año 2005 cuando comenzamos a concretar y dar los primeros pasos en este largo y maravilloso camino que nos acercaba a ti. Un invisible hilo rojo comenzaba a trenzarse, sin que nosotros supiéramos muy bien cómo.
